“Porque mañana será tu primer día, digo… si aún sigues queriendo ser corredor de bolsa”. Esta frase emocionaba al espectador al finalizar la película protagonizada por Will Smith, “En busca de la Felicidad”, basada en la historia real de Chris Gardner, vendedor ambulante que consiguió salir de la miseria con su hijo pequeño y triunfar en Estados Unidos.
Y es que la alegría es la emoción básica de afirmación más buscada por las personas en general, precede al sentimiento de la felicidad. Se trata de un estado que genera bienestar general, altos niveles de energía, y una poderosa disposición. Y así nos lo transmite Will Smith en este “film”. La estimula algo agradable o positivo, en el caso de la película “el haber conseguido finalmente el empleo”, hace que el protagonista entre en un estado de euforia (afecto) en este caso. En otros casos, la respuesta o afecto vinculado con algo agradable o positivo, podría ser la diversión, emoción de la que hemos hablado en otros post y publicaciones para generar una buena experiencia de consumo. El sentimiento que se deriva de la alegría, que escenifica Will Smith en el pasaje, es el de felicidad.
Hay compañías que han elegido esta emoción para generarla en sus clientes, Coca Cola es en ésto un referente y toda su estrategia gira alrededor de la generación de esta emoción y su sentimiento. Otras compañías que la promueven estratégicamente entre sus empleados, como motor del cliente interno son Zappos, Ritz Carlton, Singapur Airlines o Starbucks. En EMO Insights International, por ejemplo se ha determinado que es la emoción que debe regir nuestra cultura organizacional y lo que debemos transmitir a nuestros empleados, por lo que hemos creado rituales como los lunes y jueves emocionales en los que generamos la emoción de alegría a través de música energizante y contenidos inspiradores.
¿Hacéis algo para generar alegría en vuestras organizaciones? En los siguientes post haré una inmersión en la sorpresa.
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